miércoles, 23 de diciembre de 2015

Veganos vs Zombies

El grupo de escritores a los que han bautizado como "Los Malkavians de la colina" acaban de pasar a redacción la siguiente historia.
Veganos vs Zombies
La tierra esta sufriendo una época de crisis. Los hombres y mujeres que se autodenominan de moral superior (veganos) están tomando el mundo. Una mujer, Beatrix, esta decidida a reanimar al Führer, pero para ello necesita la sangre aria vegana de cientos de ellos. Así que coge a Apio dorado (es así como llama a su fusta) y se dirige siguiendo un antiguo pergamino, en busca de un artefacto de poder para poder encontrar a los veganos puros y de paso exterminar a todos los comejamones del mundo.
Su busqueda lleva a la nazi dominatrix a Chernobil, donde encuentra el artefacto de poder: la tostadora zombie; una tostadora a la que la radiación ha mutado sus componentes, creando sándwichs de jamón infectado.
De vuelta inaugura una cafetería, donde expande el mal zombie, entre bikini y bikini, con una sonrisa y precios sospechosamente razonables.
Rafael, un vegano converso y traumatizado por su oscuro pasado de excesos cárnicos, ve como poco a poco sus amigos y familiares van cogiendo cara de lunes incluso los viernes noche. Indagando en la causa, ve que todos son clientes asiduos de la cafetería de Beatrix, y decide investigar.
Una noche sin luna, se cuela en la cafetería y allí descubre el terrorífico secreto. Una tostadora con dientes, empezó a cantar pidiendo que la alimentara con fuet. Haciendo de tripas corazón, se le acerco, fuet en mano, y una lengua babosa se lo arrebato. Rafael metió a la tostadora en su mochila y huyo del lugar.
Pero la infección era ya demasiado grande, y los zombies campaban a sus anchas, atacando las charcuterías, causando caos y destrucción cuando los fuets se acabaron.
Los veganos se atrincheraron en la única tienda de productos orgánicos que había en la ciudad. Con las miles de pancartas con lemas de gente de moral superior, consiguieron tapiar la entrada y las ventanas. Allí hicieron una asamblea para decidir que hacer. Rafael entonces mostro a la tostadora zombie, y explico lo que había descubierto. Los veganos pidieron que destruyera a la tostadora, lo que no contaban era que la tostadora y el se habian vuelto inseparables, por lo que decidió abandonarlos y seguir la lucha por su cuenta.
Los zombies rodean la tienda y empiezan a abrir una brecha. Los veganos se limitan a chillar y a correr como pollos sin cabeza, y Rafael vuelve, se encarama a unas cajas de melones de Villaconejos, y poniendo porte a lo William Wallace, grita:
-¡Hermanos! Hemos comido cosas que ellos no creerian. Apio transgenico, tofu sin nada, falafels resecos. Hemos paladeado el sabor del vacio... Nos pueden quitar la vida, pero jamas nos quitaran...¡¡¡LA SUPREMACIA MORAL!!!
La trinchera cede y empieza la gran batalla. Los veganos esgrimiendo ramilletes de perejil contra los ultraortodoxos comedores de carne infectados. Lanzan cebollas a modo de granadas, con la esperanza que el olor los repudie. Los zombies atrapan a uno de los veganos y empiezan a mordisquearlo, pero lo sueltan enseguida debido a su horripilante sabor a repollo. Pero los veganos van perdiendo la fuerza, debido a su carencia de proteínas, y poco a poco se van volviendo zombies-veganos.
Beatrix la nazi dominatrix, que ha estado observado todo desde el principio, se acerca con su furgoneta a la entrada de la tienda, arrollando a cientos de zombies."-Rápido, entrad, os llevare a un lugar seguro" y la mayoría de veganos que quedan en pie, se meten sin dudarlo en el Pussy-wagon, por mucho que grite Rafael "¡Es una trampa!" nadie le hace caso. Un zombie intenta morderle las sandalias, pero la tostadora zombie, se lanza sin dudarlo y le arranca el brazo. Al probar la carne infectada, la tostadora sufre una megamutación y le salen patas; empezando a morder y patear zombies repartiendo estopa de la buena.
Rafael, la tostadora y los pocos veganos que siguen con él, consiguen escapar en bicicletas, aprovechando la brecha abierta por la Pussy-wagon. Se esconden en un huerto urbano, y allí tienen que decidir que hacer. La asamblea esta dividida. Unos quieren escapar y los otros rescatar a sus hermanos. Todos miraron a Rafael. Este se ergio y dijo: Recordad, recordad porque nos hicimos veganos. Coliflor, achicoria y melón. No veo la demora y siempre es la hora de repudiar el jamón." y cogiendo un spray, pinto en su camiseta "V de vegano"
Rafael observa que la tostadora intenta escapar, parece que ha olido algo. Siguiendo su intuición decide seguirla en bici, dejando al grupo que sigue en asamblea. La tostadora zombie, lo lleva a una fabrica de fuets abandonada y allí ve a la Pussy-wagon aparcada. Se oyen gritos en el interior de la fabrica. Al asomarse por una ventana, ve al Führer en una gran mesa, rodeado de banderas y fruteros nazis. En varias mesas adyacentes, están varios veganos conectados mediante tubos al líder del tercer reich. A los que no, Beatrix les practica sus juegecitos, introduciendo sus delicados puños por donde amargan los pepinos, utilizando la milenaria y desgarradora técnica del double first fucking, con su traje de látex y cuero de gala. Rafael al ver esto, le invade la furia y la savia que corre por sus venas lo desata en un frenesí de guindilla fantasma.

Entra saltando por la ventana, atravesando los cristales. Beatrix se gira y se ríe sadicamente al verlo.

-Llegas tarde, su sacrificio es para un bien mayor, en solo unas horas el Führer llenara de ensaladas todas las mesas del mundo y castigara a los come-carnes peor de lo que hice yo.
-Nadie de los de aquí nos hicimos veganos para esto. Dejar de comer carne es una elección personal, solo los moralmente superiores pueden hacerlo. Obligar a los que no están preparados para ello, es un error, y voy a impedirlo.
-Eres muy gracioso e insignificante, por ello tengo algo especial para ti.- se gira y se enfunda su cinturon strapon. Rafael comienza a tener sudores fríos ante la visión terrorífica de semejante artilugio. Que empiece la fiesta.
La lucha comienza. Beatrix esgrime a Apio Dorado con fuerza y hace retroceder a Rafael, que se protege como puede. La dominatrix le da una soberbia patada con sus botas de tacón de aguja y lo empotra contra unas cajas de fuets, que se rompen y se esparcen a su alrededor. Nuestro líder vegano, los mira y el espíritu de Casademont lo embarga. Coge los fuets y los ata a modo de nunchakus y arremete feroz contra la nazi. Beatrix se ve sobrepasada y cansada por la falta de proteínas, retrocede e intenta huir. En medio de la pelea la cuerdecilla con la grapa del fuet, sale disparada y se mete en la garganta de Beatrix, asfixiándola.
Rafael también esta cansado. Mira el fuet y el fuet le devuelve la mirada y asiente. En ese momento Rafael le da un bocado al fuet que lo deja temblando y se siente revitalizado. Pero no tiene tiempo de gozar de esa sensación, debe liberar a sus hermanos y destruir al Führer, conectando los tubos a los fuets, para envenenarlo con el cocktail de grasas trans, colesterol y conservantes.
La tostadora zombie consigue entrar y se acerca a él. Rafael alza el fuet y dice:
-Alzad vuestro fuet hermanos, hemos de defender nuestra tierra, hemos de terminar con esta tortura de que estén continuamente vendiéndonos las bondades de ser un consumidor de tofu. Si dios hubiera querido que comiésemos lechuga nos habría hecho caracoles, ¡joder!
Acaba la película con imagen a lo mad max con la tostadora zombie, erradicadora de hipsters y del mal veganico que azota el mundo, en el papel de perro y Rafael esgrimiendo un fuet caminando hacia el horizonte.






No hay comentarios:

Publicar un comentario